LA REPRODUCCIÓN DE LAS MEDUSAS

Todas las medusas son o macho o hembra, pero ambos pueden crear óvulos y espermatozoides, con esto en mente, no hacen falta dos de ellos para crear descendencia, pueden crear nueva vida asexual.

Dado que el apareamiento de las medusas puede ocurrir durante todo el año, las diferentes etapas de su  ciclo de vida pueden ocurrir en cualquier punto dado en el tiempo.  En verano la mayoría de las medusas coloca los huevos en el agua para la fertilización, las temperaturas más calientes, combinadas con más comida disponible son las condiciones principales para la creación de descendencia.

Una vez que el óvulo y el espermatozoide se han unido, se forman las larvas, estas se forman en los tentáculos de la medusa adulta. Luego se separan y flotan en el agua, pueden ser difíciles de identificar si no se sabe muy bien lo que está buscando. Las larvas de medusa son de forma ovalada, para ayudarles en el movimiento. Seguirán flotando en el agua hasta que encuentran algo donde adherirse.

Una vez que se adhieren pasan a la siguiente parte del ciclo de vida de las medusas, esto se conoce como la fase de pólipo. Es aquí cuando desarrollan las partes sólidas del cuerpo, por ejemplo, la boca y luego los tentáculos. Con esos tentáculos pegajosos capturan a sus presas, que luego colocan en su boca.

La etapa de pólipo puede tener una duración de un año o más en el ciclo de vida de las medusas. Nuevos pólipos continuarán desarrollándose a partir de un núcleo central, conocido como el tronco, poseen tubos de alimentación, muy pequeños, que permiten que cada uno de los pólipos en ese grupo sea capaz de obtener las cantidades adecuadas de nutrientes.

Cuando un grupo de pólipos alcanza la madurez, se crearán ranuras a través de la longitud de los mismos, a medida que comienzan a desprenderse de la colonia se convertirán en medusas, estas ya si se puede mover libremente alrededor. Las medusas utilizan la corriente marina y el viento para moverse horizontalmente, aunque las especies más grandes de medusas tienen la capacidad de moverse verticalmente, bajo su propio control.

Las medusas pasan por dos etapas distintas. La primera es la etapa poliploide, donde toman la forma de una entidad pequeña con tentáculos para alimentarse, tienden a flotar en el agua sin ningún control real sobre sus movimientos. La influencia de la corriente marina y el viento los lleva alrededor.

La segunda etapa es cuando se produce la reproducción o la creación de la descendencia. Dado que cada medusa puede crear óvulos y esperma, no siempre se requiere que coincidan ambos sexos en el proceso de creación de la descendencia.